El último deseo del papa Francisco antes de morir | Intentó salvar la crisis económica del Vaticano: "Son 250 millones de dólares" 251d4s
Hasta el último segundo, el Santo Padre, Francisco, buscó por todos los medios que la Iglesia católica, más exactamente en la Santa Sede, se pudiera solucionar el terrible hueco fiscal que le dejó al IOR una mala istración en las finanzas. d6w1p
Incluso en su lecho de muerte, el papa Francisco no abandonó su batalla más ardua: sanear las deterioradas finanzas del Vaticano. El 27 de febrero, desde su habitación en el Hospital Gemelli, anunció la creación de una comisión para recaudar fondos y contener el déficit estructural. "Son 250 millones de dólares", advirtió, refiriéndose al histórico hueco dejado por escándalos pasados.
La iniciativa fue un último intento por contrarrestar la presión interna. Desde 2021, el Papa había ejecutado duros recortes de salarios, subsidios de vivienda y contratos inflados, enfrentándose a la poderosa Curia. El papa Francisco que lideró a más de 1.300 millones de católicos en todo el mundo pidió transparencia y disciplina, convencido de que unas finanzas limpias eran esenciales para el bien de los pobres, su prioridad espiritual y moral.
Recordemos que el papa Francisco falleció a los 88 años, el lunes de Pascua, un 21 de abril, pero lo hizo sin ver culminado su proyecto, pero con avances significativos en la profesionalización del manejo financiero del Vaticano. Aun así, el déficit persistía, sobre todo por el gasto operativo de la Curia, el cual ronda los 900 millones de dólares anuales, con un saldo negativo recurrente superior a los 50 millones.
Una crisis financiera heredada de décadas de opacidad y escándalos 6z402e
Cuando el papa Francisco llegó al Vaticano en 2013, heredó una istración marcada por prácticas oscuras y estructuras ineficaces, se decía de hecho, que su elección había sido estratégica para cambiar la imagen de la Iglesia y hacer un barrido para encaminar de nuevo la fe y el respeto por la institución.
Las finanzas estaban controladas por clérigos sin experiencia financiera, y aún resonaban los ecos del escándalo del Banco Ambrosiano de los años 80, que dejó un agujero de 250 millones de dólares al Instituto para las Obras de Religión (IOR), indicó un artículo en Fortune.
El pontífice argentino respondió convocando a expertos internacionales y contratando auditoras como KPMG, Deloitte y EY. En 2014 fundó la Secretaría de Economía, la primera agencia con autoridad centralizada para gestionar todos los fondos vaticanos.
"Quiero una organización autosuficiente", declaró Francisco, decidido a terminar con siglos de caos presupuestario. 2l5w3a
Reformas profundas contra resistencias internas 716g5b
Los recortes implementados por el Papa desde 2021 incluyeron una reducción salarial para cardenales y altos funcionarios, además de la eliminación de subsidios de vivienda. En 2023, por primera vez en décadas, se exigió un plan con cronograma estricto para alcanzar el "déficit cero".
Su decisión generó resistencia entre los burócratas de la Curia. Pero Francisco insistía: "Cuando la istración está gorda, es malsana". También denunció sobrecostos y malas prácticas: "¡No pagamos!", gritó al referirse a facturas infladas. Su lema era claro: "Hagamos dinero para los pobres", confiando la gestión a verdaderos banqueros, no a clérigos improvisados.
El rol del Óbolo de San Pedro y la herida abierta de la Curia 6p6bc
Uno de los puntos más sensibles para Francisco fue el uso del Óbolo de San Pedro, la colecta global destinada a la caridad. En años recientes, millones fueron redirigidos a cubrir gastos operativos, contradiciendo el propósito original. El Papa deseaba que ese dinero solo sirviera a los más necesitados.
A pesar de las reformas, escándalos como la compra fallida de un edificio en Londres por 400 millones de dólares. vendido luego con una pérdida de 150 millones, demostraban la persistencia de la mala gestión. No obstante, el papaFrancisco logró que los responsables fueran juzgados y condenados, incluyendo a un cardenal.
¿Qué desafíos enfrentará ahora el papa León XIV? 2l3f48
El nuevo pontífice, León XIV, hereda un Vaticano más transparente, pero aún en crisis estructural. Deberá continuar con las reformas y resolver el problema de las pensiones, la reducción de personal y el déficit crónico de la Curia. También deberá restaurar la confianza de los fieles en el uso de sus donaciones.
Sin el carisma ni la experiencia ejecutiva del ya fallecido papa Francisco, León XIV tendría que apoyarse en los cimientos institucionales que su antecesor dejó. La gran incógnita es si tendrá la voluntad y la autoridad necesarias para llevar la cruz financiera hasta la cima del cambio verdadero.