"Todos los trabajadores del mundo van a tener que empezar a ser un poco más emprendedores" 2j5v4r
"Todos los trabajadores del mundo van a tener que empezar a ser un poco más emprendedores": esta frase que le escuché decir recientemente a Máximo Cavazzani (founder de Etermax), me quedó resonando.
En un mundo atravesado por la Inteligencia Artificial, la automatización y cambios vertiginosos, la actitud emprendedora no solo cobra valor, se vuelve indispensable. Ser emprendedor no es solo crear una empresa, es una forma de ver el mundo, de enfrentarlo con una actitud de aprendizaje continuo, curiosidad, coraje y ganas de transformarlo.
Estoy convencida de que fomentar esta mentalidad cuanto antes en nuestros jóvenes es clave para construir un futuro dinámico, con más oportunidades reales para todos.
Hace muy poco, en la Experiencia Endeavor Sub20, pudimos asomarnos al mundo interior de esta nueva generación. Fue un encuentro movilizante, cargado de energía e inspiración. También realizamos una encuesta a 5.000 estudiantes del último año del secundario en CABA y GBA. ¿El dato que más me impactó? Que un 75,9% de los jóvenes quiere emprender al terminar el colegio. Ese número no es una estadística más: es una señal potente. Hay un deseo, hay una vocación, hay un potencial enorme ahí.
Fomentar esta mentalidad emprendedora desde temprana edad trasciende el interés individual; impacta directamente en la vitalidad económica y la competitividad de una nación. Una generación con mentalidad emprendedora garantiza un flujo constante de nuevas ideas, nuevos empleos y nuevas oportunidades. Esta forma de encarar la vida se cultiva, se enseña y se inspira.
Y desde mi experiencia hay cinco habilidades fundamentales que vale la pena fortalecer si queremos que cada vez más jóvenes se animen a emprender sus propias historias:
Flexibilidad. La capacidad de adaptación es uno de los aspectos más difíciles de adoptar, pero es necesaria para poder enfrentar cualquier obstáculo que se presente y sacar provecho de cada cambio coyuntural. Saber leer el contexto, reformular ideas y seguir adelante. Es alentador ver que, a pesar de la complejidad del panorama socioeconómico, un significativo 58,7% de los jóvenes encuestados cree firmemente en la posibilidad de emprender. Esta resiliencia es un cimiento sólido para construir.
Seguridad. Se necesita confianza en uno para afrontar un desafío. Animarse a dar el paso, incluso sabiendo que hay chances de fallar, es lo que marca la diferencia. Y los jóvenes lo demuestran con su interés en sectores pujantes como la tecnología e innovación (41,6%), un ámbito que exige confianza y audacia para explorar nuevas fronteras.
Invertir en uno mismo. El desarrollo personal es clave para la supervivencia de un emprendedor. La formación constante y multidisciplinaria no sólo abre puertas: aprender nuevas habilidades te mantiene competitivo.
Creatividad. Pensar fuera de la caja es un aspecto fundamental a la hora de emprender: ser curioso, hacer preguntas, ver soluciones dónde otros ven necesidades insatisfechas. No es cierta la idea de que hay personas que no son creativas porque el pensamiento creativo también se entrena. Está en uno desafiarse y luchar por obtener la inspiración necesaria.
La encuesta demostró un interés marcado en la cultura urbana (40,4%) y el entretenimiento y las redes sociales (38,6%) lo que refleja una búsqueda constante de nuevas formas de expresión y conexión, habilidades valiosas en el mundo emprendedor. Así como también el interés de los jóvenes en la gastronomía o emprendimientos tradicionales (25,2%) con una visión fresca, o en el cuidado del medioambiente y la sostenibilidad (14,4%) con ideas innovadoras, confirman estas habilidades.
5. Finalmente, la perseverancia. Los cuatros factores previamente mencionados no funcionan si no se cuenta con un fuerte deseo de superación. Emprender es aprender y disfrutar del camino. Cambiar error por aprendizaje. Emprender es un camino, no un destino.
En la Experiencia Endeavor Sub20 no solo vimos talento, vimos hambre de futuro. Y eso me renueva la esperanza. Porque cuando esa chispa aparece, lo mejor que podemos hacer es cuidarla, nutrirla, expandirla.
Hoy, más que nunca, no se trata solo de formar emprendedores. Se trata de formar personas con coraje, visión y propósito. Personas que quieran dejar una huella. Y por suerte, esa generación ya está en marcha.
Las más leídas de Columnistas 3l4q2
IVA provincial: hay realidades que no resuelve y también hay alternativas superadoras 255u4c
Destacadas de hoy l3pz
3e1q5
Cuál es el precio del dólar oficial y de los dólares financieros CCL y MEP.
Toda la información que necesitás sobre cómo sigue la semana en los mercados.
Bonos, acciones, riesgo país, Cedears y plazo fijo.
Compartí tus comentarios 164b